lunes, 17 de noviembre de 2008

Los cronistas policiales, en búsqueda de historias ocultas

Las páginas policiales de los diarios son espacios fundamentales para encontrarse con la literatura”, declaró Ricardo Ragendorfer, confesando su gusto por las atmósferas y personajes de ficción que envuelven la crónica policial, donde las anécdotas dan vida a personajes tanto anónimos como poderosos, a relatos inéditos que merodean algunos casos famosos. Las palabras del autor de La Bonaerense dieron comienzo a la charla del jueves pasado en el Centro Cultural Islas Malvinas, dedicada a la crónica policial. Fueron también invitados los periodistas Hipólito “Pico” Sanzone y Carlos Rodríguez, en el segundo encuentro de noviembre.
El revés de la trama de importantes casos policiales como el de José Luis Cabezas, Barreda, el soldado Carrasco, Oriel Briant, Belsunce entre otros, resultó ser la gran preocupación de los tres invitados. Ragendorfer compartió sus inquietudes sobre la muerte del cantante Rodrigo: “de a poco fui enterándome el trasfondo, Pesquera huía más de sus delicadas estafas que de una mafia de la bailanta, apropósito inexistente; casi como en un cuento de Patricia Highsmith, los damnificados de esas estafas se iban acumulando en las puertas de los edificios que Pesquera abandonaba, con la mala suerte de haber sido involucrado en un caso tan mediático como el de Rodrigo”.
Uno de los integrantes del público les pidió elegir una crónica periodística de importancia en su trayectoria. Carlos Rodríguez contó una anécdota con Daniel “Tractorcito” Cabrera, un importante ladrón de bancos, con quien mantuvo una estrecha relación consumada durante el período de investigación. En la fecha de su cumpleaños lo llamaba desde la cárcel con la intención de ser el primero en saludarlo, “antes que mi madre y mis allegados”, acotó el periodista de Página /12.
Ragendorfer ante la misma pregunta optó por “El túnel de los huesos”, la historia sobre una fuga de presos en Devoto. En víspera de la fuga, los presos, iluminados fantasmagóricamente por bombitas de 25 watts, y llenos de polvillo, se toparon con un túnel colmado de restos humanos. Así, “El túnel de los huesos”, publicado en la revista Página/ 30, se transformó en una de las crónicas más emblemáticas de su carrera.
“Nadie mata en silencio”, fue la frase inquietante de la noche, en voz de Hipólito “Pico” Sanzone, histórico redactor de policiales del diario El Día. “En cada crimen hay alguien que se queda con las últimas palabras, y el periodismo no tiene acceso a esas palabras”, aclaró, como parte del enigma más hermético de la profesión.
Hacia el final del encuentro, los tres invitados coincidieron en la idea de que la ficción supera la realidad con personajes oscuros como Mario Naldi, comisario de “La maldita policía”, que por culpa de Ragendorfer debió vender su costoso yate. O el brutal informante de Carlos Rodríguez, funcionario de un ex-centro clandestino de detención, también de apellido Rodríguez; o De Gastaldi, el comisario que confesó a Pico Sanzone que su fortuna se lo debía a su padre, inventor del “Toddy”, conocido chocolate en polvo.
El jueves próximo a las 19.30 hs., la mesa La novela con pólvora y política, el ciclo dedicado al género policial en la ficción y no- ficción cerrará con la presencia de los escritores Juan Sasturain y Ernesto Mallo.

Sofía Silva.


Pico Sanzone, Ricardo Ragendorfer, Ramón Tarruella (moderador) y Carlos Rodríguez.

1 comentario:

alguien que anda por ahí dijo...

Hola!!! Les quería agredecer porque la charla estuvo muy interesante... Qué bueno que haya grupos como ustedes que proponen estos temas tan atrapantes y traen gente que puede aportar su mirada... Yo creo que con un poco más de difusión van a lograr llegar a más personas... yo voy a aportar mi granito de arena en cuanto a eso...
Gracias de nuevo!
Un saludo.